Las cartas familiares

 23 de enero: Día Mundial de las Cartas Escritas a Mano, ¿qué significado  tiene este día?

La carta familiar es un tipo de correspondencia que entra dentro de las denominadas como cartas informales. Se diferencia de las cartas formales en que se escribe de manera personal, directamente a las personas de la familia.

Y aunque no existen reglas fijas de cómo debe redactarse este tipo de documentos, tal y como ocurre en las cartas formales, sí que encontramos una estructura ordinaria dividida en partes o secciones que veremos a continuación:

Las partes de una carta familiar son las siguientes:

  • El membrete
  • La fecha
  • La introducción
  • El cuerpo
  • La despedida
  • La firma
  • Postdata

El membrete: Se trata de la información de contacto con la que pueden comunicarse con la persona que redacta la carta. Se utiliza la zona superior derecha. Aparecen aquellos datos tales como la dirección postal, el nombre completo, el código postal, teléfono, e incluso correo electrónico.

La fecha: Bajo el membrete, es habitual escribir la población y fecha desde la que se escribe. En caso de que la población ya aparezca en el membrete, es posible omitirla y dejar la fecha únicamente con el día, mes y año.

Introducción: Al tratarse de un familiar, resulta sencillo, ya que podemos usar cualquier tipo de tratamiento. Generalmente se utiliza “querido….” Seguido del nombre de la persona y finalizando en dos puntos. También es habitual comenzar el primer párrafo de la carta con alguna pregunta de cortesía, tal como “¿Cómo estás? ¿Cómo te va la vida? ¡Cuánto tiempo!

El cuerpo de la carta: Debe ser un contenido cercano, amistoso y familiar. Una buena forma de expresarse es hacerlo tal y como lo haríamos en una conversación cara a cara o por teléfono. No es necesario que las ideas estén ordenadas ni que se siga un guion establecido. Si es necesario, podemos realizar un borrador previo para organizar las ideas, pero en una carta familiar se permite la improvisación.

Despedida: Igual que en el caso de la introducción, no es necesario acudir a ninguna fórmula de cortesía. Basta con hacerlo con naturalidad, cariño y cercanía. Algunos ejemplos de despedida pudieran ser los siguientes:

  • Nos vemos pronto
  • Saludos a tu madre de mi parte
  • Estoy deseando que nos volvamos a ver
  • Un abrazo de tu sobrino
  • Te quiere tu primo

Firma: No es necesaria, pero habitualmente la gente firma sus cartas, ya sean familiares, formales o informales.

Postdata: Por último, a diferencia de las cartas formales, y debido al estilo improvisado de las cartas familiares, es posible al escribir se olvide mencionar algún tipo de información. En lugar de comenzar de nuevo la carta, es posible acomodar estas frases en lo que se denomina como postdata. Con la abreviatura P.D.

 

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